Library Futures y SPARC condenan la retirada de libros de texto electrónicos de Wiley

A fines de agosto, al comienzo del semestre escolar de otoño de 2022, Wiley Publishing Company retiró abruptamente 1.379 títulos multidisciplinarios de Proquest, un proveedor de colecciones universitarias de libros electrónicos en todo el mundo. Como resultado, los bibliotecarios y miembros de la facultad en los Estados Unidos e internacionalmente se han apresurado a identificar opciones alternativas de libros de texto para sus estudiantes a medida que la pandemia amplificó el problema con las licencias restrictivas y los libros de texto electrónicos.

Library Futures y SPARC condenan enérgicamente esta acción de Wiley, que dificulta seriamente el acceso de los estudiantes a materiales de curso equitativos y asequibles. La lista completa de títulos e información de contacto público para sus autores fue compilada por Johanna Anderson de #ebookSOS.

Debido a que estos títulos ya no están disponibles para que las bibliotecas los licencien o compren, los estudiantes se verán obligados a comprar acceso de proveedores que licencian libros de texto electrónicos directamente a los estudiantes, o a comprar sus propias copias impresas. Cuando se requiere que los estudiantes licencien libros por su cuenta, interfiere con su acceso equitativo a la educación y tiene serias implicaciones para la privacidad de sus datos personales.

Al retirar inesperadamente estos títulos electrónicos de las colecciones de la biblioteca universitaria, Wiley ha trasladado efectivamente la carga financiera del acceso al material del curso únicamente a los estudiantes, lo que hace imposible acceder a los materiales del curso sin pagar, o en algunos casos, facturarse automáticamente. En la Universidad George Washington, si un instructor selecciona uno de estos textos del curso para el plan de estudios, la única manera de que un estudiante obtenga el título sin costo es competir por el acceso con otros 269 estudiantes por la única copia impresa del texto que la biblioteca ha puesto en reserva. Para citar a Heather Joseph, Directora Ejecutiva de SPARC, "Las personas todavía pueden acceder a los recursos con una tarjeta, pero ya no es con una tarjeta de biblioteca o una identificación de estudiante: es con una tarjeta de crédito".

"Es un desafío trabajar con un proveedor que no comparte nuestros valores... Una parte clave de la inclusión es la asequibilidad. Las universidades no son baratas, incluso las universidades más asequibles no son baratas. Cuando agregas el costo de los materiales de aprendizaje, impactas la capacidad de los estudiantes para perseguir sus verdaderos intereses, y realmente comienzas a crear un tipo de ambiente de tener y no tener", dijo Geneva Henry de la Universidad George Washington en Inside Higher Ed.

Library Futures y SPARC creen que es vital reconocer las implicaciones de privacidad de empujar a los estudiantes a comprar acceso a plataformas de proveedores que licencian materiales de cursos electrónicos directamente a los estudiantes. Debido a que los proveedores no están sujetos a las mismas leyes de confidencialidad que las bibliotecas para mantener la privacidad de la información personal, exigir a los estudiantes que entreguen sus datos personales a grandes empresas con fines de lucro elude tanto la privacidad de los estudiantes como las leyes de privacidad de las bibliotecas estatales que están destinadas a proteger contra los usos con fines de lucro y otros usos inapropiados de la información personal.

Finalmente, esta eliminación demuestra la insostenibilidad e imprevisibilidad de las licencias de contenido tanto para los estudiantes como para las bibliotecas. El contenido no es intercambiable: para un proveedor o editor eliminar títulos de la biblioteca poco antes de que comience un semestre sería imposible en forma impresa; este movimiento descarado de Wiley debería preocupar a las bibliotecas académicas de todo el mundo. Las acciones de Wiley son particularmente dañinas para las personas con dificultades para acceder al texto impreso, los vulnerables y los estudiantes fuera del campus en una era de aprendizaje a distancia ampliado.

Los defensores, expertos en políticas, académicos y bibliotecarios deben asegurarse de que las grandes corporaciones no puedan interferir con el plan de estudios e interrumpir el aprendizaje al extraer materiales educativos cruciales de los estudiantes cuando más lo necesitan. La eliminación de Wiley de más de 1300 títulos interrumpe el papel que las bibliotecas han desempeñado tradicionalmente en el suministro de reservas de cursos, así como el rico mercado secundario que existe para los materiales del curso. Los libros abiertos y accesibles son un tema central para SPARC, así como para Library Futures, y debemos responsabilizar a los proveedores por tomar decisiones unilaterales que dañan el aprendizaje y la accesibilidad de la información para todos los estudiantes.

Juliya Ziskina

A cerca de libraryfutures.net

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